Miércoles 27 de enero del 2016. Aún recuerdo ese día con gran emoción cuando por sorpresa me avisaron que a las 20:00h tenía una cita en la Plaza de Callao, Madrid para asistir al preestreno de `La verdad duele´la nueva película protagonizada por el mismísimo Will Smith. Lo recuerdo con ilusión tras volver a visualizar en mi mente esa sala repleta de periodistas enloquecidos por ver a uno de sus ídolos en persona a escasos metros de ellos.
Actor americano, metro 88 y una gran carrera profesional que puedo decir que la he seguido desde bien pequeña. Ha tenido un gran éxito no solo por sus comedias como la serie popular `El príncipe de Bel-Air´que le llevó a su progresiva traslación al ámbito cinematográfico, sino por films donde me marcó realmente y me hicieron soltar lágrimas y meterme en la piel del propio actor `Siete almas´o la grandísima `En busca de la felicidad´, donde el propio Will actúa con su hijo , un hombre sin recursos con un talento brillante pero que no le permite cubrir sus propias necesidades básicas y donde los dos protagonistas tendrán que afrontar muchas adversidades para hacer realidad su sueño de una vida mejor.
En los últimos meses Europa ha vivido una gran oleada migratoria de sirios en busca de esa felicidad, la de poder huir de los bombardeos continuos, poder dar cobijo a sus hijos, tener algo con lo que comer cada día y poder descubrir quién es esa tal felicidad de la que todo el mundo habla mientras se sumergen en mares con lanchas que apenas logran cruzar unos metros con una familia entera metida en ella. Personas que acampan durante meses tras una barrera esperando que "un tal señor con gorra, uniforme y pistolas" les permitan llegar a un lugar seguro donde su vida valga igual que la del resto del planeta. Un drama diario del que muchos europeos no se imaginan ni la mitad de las atrocidades que viven ya que los medios de comunicación no lo publican, no es algo que venda o simplemente están tan acostumbrados a tales dramas e historias de Oriente que no les merece la pena anunciar las miles de vidas que se pierden cada día en el mar, los más de 10.000 niños refugiados que habrían llegado a Europa solos porque sus familias no tienenn esos recursos para ir juntos a un país nuevo donde puedan cubrir las necesidades básicas como vivir, respirar, comer y beber y que han desaparecido del mapa según cuentan los diarios The Observer y The Guardian.
Según Save the Chilren, se estima que 26.000 niños solos entraron en Europa el pasado año. Europol tiene 900 efectivos de los servicios de inteligencia y la policía trabajando en este asunto y explica que el 27% de los que llegaron el pasado año eran menores de edad. Ya sea que estén registrados o no, estamos hablando de 270 mil niños. No todos están solos, pero un gran porcentaje sí y estimamos que esa cifra podría llegar a los 10.000 los que han desaparecido desde que entraron en Europa.
Es aquí cuando me viene a la cabeza ese gran actor en el preestreno de su última película. Porque la verdad duele y porque en ese momento recordé una gran frase de `En busca de la felicidad´ que dice lo siguiente: "empecé a pensar en Thomas Jefferson y en la Declaración de la Independencia. Nuestro derecho a tener "vida y libertad" y a "buscar la felicidad". y recuerdo que pensé ¿cómo se le ocurrió poner la parte de la búsqueda? Quizás la felicidad es algo que solo se busca y tal vez nunca la podamos obtener hagamos lo que hagamos. ¿cómo supo eso?"
